Adoro cuando hueles a lluvia o a mar, y yo sólo tengo ganas de besarte. Cuándo nuestros juegos terminan con besos o a abrazos. Quizá era nuestro destino, encontrarnos y curarnos las heridas. Hoy prometo llevarte al cielo para terminar en mi cama, o al revés ¿Quién sabe? Un día como hoy, sólo puedo prometerte una cosa : Voy a quitarte el miedo a las alturas para que puedas volar conmigo cada día. Tú sólo tienes que prometerme que te quedarás conmigo. Me apetece subir a todas las norias del mundo contigo y ver como conquistamos el mundo poco a poco. Y conocer todos los mares, todas las carreteras de tu mano. De doce a doce y tiro porqué me toca, menudo viaje interminable el nuestro. Nos vemos esta noche dónde nacen los sueños.

No hay comentarios:

Publicar un comentario